Los acuerdos de Paz firmados con las FARC en 2016, que derivaron en la desmovilización de esa fuerza, no han sido respetados por el gobierno colombiano. Desde entonces más de 300 dirigentes sociales, en su mayoría del campesinado, han sido asesinados a manos de fuerzas paramilitares vinculadas a la apropiación ilegal de tierras, y el gobierno ha actuado con total indiferencia. Escuchá el audio aquí:
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Desde Argentina, ciudadanos colombianos junto a organizaciones de derechos humanos, denuncian que el gobierno de ese país no está respetando el tratado de paz que llevó a la desmovilización de las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas (FARC), permitiendo que grupos paramilitares asesinen dirigentes con el fin de apropiarse de las tierras del campesinado.
En diálogo con el Colectivo de Comunicación El Yunque, el investigador de la CELAG y analista internacional, Javier Calderón, quien reside en Argentina junto a su familia, a causa de la situación de violencia que se vive en su país, sostuvo que “el motivo por el que reclamamos es la violencia sistemática contra los líderes y liderezas del movimiento social colombiano”.
Y recordó: “Desde la firma del acuerdo de paz en el 2016 ya van asesinadas 311 personas, que en su mayoría lideraban procesos sociales de acompañamiento al proceso de paz, proceso de restitución de tierras, y trabajadores por la transformación del campo colombiano, de la ruralidad, comunidades afrocolombianas, comunidades originarias”.
El colombiano exigió al gobierno de Juan Manuel Santos que “cumpla con los acuerdo de paz y que cumpla con sus obligaciones constitucionales de generar justicia y de generar seguridad para la población”.
