Rogelio Contreras es artesano, vive en villa Unión y su producción es enteramente realizada con elementos autóctonos. La venta de estos artículos empezó a ser fundamental para su economía. La intervención del Estado en el sector, organizando y articulando, es fundamental para el desarrollo de una economía sustentable y soberana.
Para el Primer Encuentro Provincial de Ferias de la Economía Popular, arribaron de distintos Departamentos, trabajadorxs y artesanxs que forman parte de las ferias que organizan los municipios del interior. La idea fue exhibir en Capital, la producción y la contención que brinda cada municipio al sector de la Economía Popular, y al mismo tiempo consensuar mecanismos de comercialización.
La iniciativa surgió de la Secretaria de Participación Social, a cargo de Guido Varas; quien tiene la responsabilidad de impulsar una nueva área de gobierno habilitada por Sergio Casas con el fin de institucionalizar la participación estatal en el desarrollo de la Economía Popular. Se sumaron a esta iniciativa, las secretarías de Turismo y de Cultura.
El cuero, la piedra y el hueso son elementos fáciles de encontrar si se vive en Villa Unión, el trabajo de Rogelio es agregarle valor y belleza. El estilo de sus artesanías combina, en piezas con motivos originarios o folclóricos, lo rústico con lo elaborado.
El aprovechamiento del cuero de cabrito o de cordero, de gran belleza y atractivo para el turismo, es muy importante. Es sabido que gran parte de los cueros de los productores caprinos no se aprovecha y que tampoco hay quien los compre para su uso en la industria.
Conversando sobre esto con Rogelio, nos comenta que el cuero que usa es curtido de manera orgánica, sin ningún producto industrial, lo cual también le agrega valor. También usa piedras del lugar de origen volcánico, con la cual trabaja motivos aborígenes.
“Esto ayuda un montón, para alguien con familia como yo y además es algo que uno hace con gusto”, comenta Rogelio. Para él, la organización de la economía popular es una “contención tanto para productores como para artesanos”. Al respecto comenta: “En la zona de Villa Unión vino muy bien, creo que debería aprovecharse mucho más. Hay un predio especial para esto y faltaría más participación de la gente”. “En estos momentos, que esta difícil la economía, trabajar la propia huerta, vender en la feria y complementar con trabajos artesanales es algo muy bueno”, asegura.
